A María
“¿Oyes el sonido del mar? ¿Escuchas las olas? ¿Sientes la brisa? ¿A dónde
te llevan?” Todo esto le preguntaba sin cesar al oído, sin dejarlo apartarse de
mi lado. No quería perderlo, no podía perderlo, lo necesitaba allí. Cuanto lo quería
y cuanto aun más lo quiero. No había mar, olas, ni brisa, sólo estábamos los
dos y la ciudad rodeándonos.
Cuando estábamos solos nos gustaba sentarnos relajados en el parque,
tomarnos las manos y recrear toda una escena marina. Olas rompiendo en un
acantilado. La brisa rozando nuestras mejillas. Nuestros labios fundidos
eternamente.
“¿Oyes el sonido del mar? ¿Escuchas las olas? ¿Sientes la brisa? ¿A
dónde te lleva? Porque yo si escucho y siento, y me llevan hacia ti, mi amor.”
Cómo me gusta y qué suerte tengo :-)
ResponderEliminarMaría.